FRASES PARA LOS NIÑOS.
Los niños son los Profetas del Señor.
El futuro de los niños depende del presente que vivan.
Los niños son castigados cuando los adultos se quedan sin argumentos. Cuando eres un niño sólo piensas en crecer y, cuando creces, sólo piensas en parar de crecer. Cada niño, al nacer, nos trae el mensaje de que Dios aún no ha perdido la esperanza en los hombres. Un niño siempre puede enseñar tres cosas a un adulto: a ponerse contento sin motivo, a estar siempre ocupado con algo y a exigir con todas sus fuerzas aquello que desea. El que odia a los niños, odia el amor, la ternura y la armonía que desprenden con su cariño. A veces al amor a un niño no es más que el propio gozo de vernos desde fuera amándole y gustarnos. Esa es su verdadera magia. Nos recuerdan lo que somos. Los niños no tienen pasado que les perturbe ni futuro que les preocupe ellos solo vívien el presente, esa es una de las valiosas cosas que se olvidan al crecer.
Cada niño que viene al mundo, es una nueva caricia que Dios nos manda, a pesar de todos nuestros errores. Mi alegría es; la mirada limpia y llena de amor de un niño feliz.
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